Ha llegado el momento, tu nueva casa te está esperando y la verdad es que no ves el momento de dormir en tu nueva pieza, preparar la cena en tu nueva cocina o tumbarte en el sofá de tu nuevo y flamante living. No obstante, antes de todo ello tienes que enfrentarte a la temible mudanza. No te preocupes, es posible sobrevivir a ella. Te acercamos 7 trucos para hacer frente a una mudanza sin morir en el intento.
1. Pinta tu nueva casa antes de mudarte
Ya sea una casa o departamento de arriendo o tu propia hogar, lo más inteligente es pintar antes de realizar la mudanza. Es mucho más fácil pintar una vivienda si lo haces sin muebles, además de evitar que se manchen, el ritmo de trabajo será más ágil y rápido. Asimismo, también puedes aprovechar para hacer algunas reformas mínimas, como colocar suelo laminado sobre el viejo pavimento o cambiar las ventanas si están viejas y deterioradas.
2. La mudanza, un buen momento para limpiar
Cuando hacemos una mudanza, empezamos a ver la realidad: almacenamos las cosas sin control. En muchas ocasiones guardamos de forma enfermiza cachivaches que seguramente, o no volveremos a usar, o que no tiene sentido guardar. ¡Claro! si son recuerdos emotivos o cosas que uses en el día a día, plantéate hacer una limpieza a fondo para que tu mudanza sea mucho más ligera. No tengas miedo a dejar atrás trastos inútiles u objetos que ya no vas a necesitar en tu nuevo hogar. Renovarse o morir.
3. Divide y vencerás
No cometas el error de comenzar a embalar cosas sin ton ni son. Llenar las cajas con objetos de forma completamente aleatoria (ahora una manta, ahora un cuadro y luego un robot de cocina) es una mala decisión. La organización es clave en una mudanza, sobre todo a la hora de llenar las cajas. Aquí podemos hacer caso a eso de divide y vencerás. Céntrate en una estancia y ve desmontándola poco a poco. No olvides escribir en las cajas el lugar al que pertenecen los objetos, esto te facilitará el momento de desembalar y reorganizar tu hogar.
4. Cuestión de cajas
Llenar las cajas de una mudanza requiere también un orden. Aquí la lógica se impone. Las cajas pequeñas deben ser llenadas con objetos pesados, de esta forma nos costará menos moverlas. Asimismo, las cajas grandes son las más indicadas para guardar objetos pequeños y más ligeros. Ojo con el menaje de cocina, intenta embalar la vajilla por separado y con muchísimo cuidado. No está de más que uses algún tipo de plástico envolvente acolchado (plástico-burbuja). Asimismo, copas y vasos también sería conveniente envolverlos uno a uno y ojalá en papel de diario. En este tipo de cajas no olvides colocar la etiqueta de frágil, toda precaución es poca.
5. La ropa mejor en bolsas
Puede que no tenga todo el glamour del mundo, pero la ropa en bolsas siempre es más fácil transportarla. Puedes usar también las maletas, aunque evidentemente cabrán menos pertenencias. Las bolsas de basura de grandes dimensiones son un buen recurso para trasladar ropa de cama y textil de hogar en general.
6. Limpia tus alfombras y cortinas antes de la mudanza
Parece una obviedad, pero hay gente que no cae en este detalle. ¿Te gusta la idea de llegar a tu casa y además de desembalar volverte loco con la lavadora? Seguramente no. En este caso, procura lavar tanto alfombras, cortinas, estores o visillos antes de guardarlos para la mudanza. Una vez llegues será tan sencillo como desembalar y colocarlo todo.
7. Descarga y desembala con cierto orden
El orden es importante en todo el proceso, como puedes ver. A la hora de cargar el camión, es importante también zonificar el espacio. Coloca los objetos más pesados y voluminosos al final, en posición vertical y distribuyéndolos en ambos lados. Después puedes colocar los objetos menos pesados, pero también voluminosos, como cabeceras, espejos o colchones. El espacio restante servirá para ir apilando poco a poco las cajas. En cuanto llegues a tu nueva vivienda intenta montar primero los muebles y colocar los objetos pesados dejando las cajas para el final.
Bonus track: la caja de supervivencia
No vamos a mentir, seguramente pases varios días con todo estorbando en el medio. Cajas por abrir, descontrol en la cocina, en el baño y en tu ropa. Te recomendamos lo que nos gusta llamar “caja de supervivencia”. Puede ser una maleta como la que se permiten en las cabinas de vuelo. En esta maleta o caja mete ropa y productos de aseo personal, tu pijama y ropa de trabajo. Todo ello te vendrá genial para no volverte loco las primeras noches.
hace 3 años
Muy buenas ideas, gracias, saludos. Luis
hace 3 años
Todos los puntos son importantes ya que a veces no nos organizamos y el cambio se vuelve un caos
hace 3 años
Por suerte es lo que yo hago. Gracias.
hace 3 años
Son las mismas cosas que hago al mudarme. Gracias por validar mi metodo